Dirección, Bogotá, Colombia

Abierto diariamente 8:00 am a 5:00 pm

El Cáncer: Mi Gran Maestro

Blog

¿ Que puede aprender una persona con cáncer que sufre por esta enfermedad todos los días? 

Con el cáncer podemos aprender: 

  • La aceptación de la enfermedad 
  • La fortaleza para afrontarla 
  • La fe de sanar en manos de Dios
  • Resiliencia 
  • Unidad familiar 
  • Cambio de estilo de vida 
  • Caridad 
  • Amor 
  • Perdón 
  • Oración 
  • El abandono a la paz 
  • Unidad a Dios  
  • Paciencia
  • Humildad
  • Bondad
  • Fidelidad
  • Dominio propio
  • El sentido y propósito de la vida

En el sufrimiento por una enfermedad como el cáncer la persona encuentra el espacio que le permite despojarse del egoísmo cuando decide negarse así mismo tomar su cruz y seguir a cristo. La clave está en depositar toda nuestra FE en un DIOS que se sabe que no es un dios castigador sino un Dios compasivo y misericordioso. Las experiencias trágicas enseñan a tener una confianza plena en Dios, como Job que nunca perdió su FE a pesar de vivir pérdidas, sufrimiento y enfermedad. Dios se une especialmente a nosotros a través de nuestro sufrimiento ya que el dolor representa la entrada a la redención tal como lo hizo Jesucristo en la cruz quien sufrió mucho por amor a nosotros y para lograr nuestra propia salvación restableciendo nuestra comunión con el Padre. Todos estamos llamados a acercar mas a los enfermos a Jesús. Por tanto las familias en particular tiene una misión de servir a los enfermos.

El sufrimiento ayuda al hombre a encontrarse así mismo pero también a encontrar a ese Dios que le da sentido a su dolor, y es que la felicidad no es la ausencia de dolor, es acercarnos día a día a ser santos, esto es, semejar nuestra vida a las virtudes de cristo como, la paciencia, la humildad, la bondad, la fidelidad y el dominio propio. Si cambiamos nuestra concepción sobre felicidad sin duda veremos siempre un propósito detrás de nuestro sufrimiento. La única forma de encontrar el beneficio o incluso el gozo en el sufrimiento es entender el propósito al que hemos sido llamados a través de la enfermedad y ese propósito solo se consigue a través de Dios. 

¿Pero cómo podemos cambiar la rabia, la tristeza y la angustia que nos genera una enfermedad como el cáncer por aceptación y FE? 

En la cultura hedonista (máximo placer con mínimo esfuerzo) se considera que la felicidad y el sentido de la vida se encuentra a través del dinero, la abundancia, los logros profesionales, el éxito, la felicidad y que como seres humanos estamos en el mundo solo para ser felices y no sufrir. 

La realidad se encuentra muy lejos de las creencias existentes en la cultura hedonista, todos nosotros como seres humanos debemos aprender a ser felices a través del sufrimiento, es la única forma de encontrar la verdadera felicidad. Una felicidad que solo está basada en el dinero, el éxito, la posición social, la salud y la prosperidad, es una felicidad superficial que se desvanece tan pronto y perdemos el dinero, el estatus social, el éxito y la salud.  

Uno de nuestros principales propósitos en esta vida es aprender a amar a través del dolor y el sufrimiento, aprender a encontrar la felicidad a través de la gran catedra de sabiduría de la cruz de cristo. 

Cuando aprendemos a vivir en la Cruz de Cristo, esto es, aun en medio del dolor y el sufrimiento sacar las fuerzas y la voluntad para cambiar, hacer todo lo que este en nuestras manos, abandonar viejos hábitos, cuidar nuestra alimentación, mejorar nuestras relaciones familiares, aprender a perdonar, dejar atrás el papel del víctima, y asumir con valentía nuestro llamado a cambiar nuestra vida, refugiarnos en Dios en todo momento a través de la oración, es el camino para cambiar toda esa rabia y tristeza en aceptación de una enfermedad como el cáncer. Jesucristo aun en medio del dolor y el sufrimiento y pudiendo huir de todo eso, aceptó su destino y afrontó con valentía todo lo que debía sucederle por amor a todos nosotros. EL es nuestro gran ejemplo de vida. Estamos llamados a través de enfermedades como, por ejemplo, el cáncer a imitar las virtudes de Jesucristo, pero ¿cuáles virtudes? Amor, alegría, paz, amabilidad, bondad, paciencia, fidelidad, humildad y dominio propio. 

El secreto para cambiar aquellas emociones negativas derivadas del cáncer es aprender a amar la cruz y no arrastrarla de mala gana. Aquel que acepta el cáncer y lo mira como una oportunidad de cambiar su vida, atendiendo el llamado que Dios le hace, viendo en cada situación una prueba de cambio desde el amor, y pudiendo comparar su vida en cada una de las situación de dolor y sufrimiento, al padecido por Cristo en la cruz, esta viviendo la enfermedad desde la aceptación y la FE. 

¿Debemos considerar el cáncer un castigo divino?

Hildegarda de Bingen fue una abadesa, benedictina, alemana, compositora, filosofa, naturalista y médica, canonizada en el año 2012 por el papa benedicto XVI y nombrada como santa de la iglesia catolica universal por su gran contribucion al bien de la humanidad en especifico en el area de la salud.  definió la enfermedad como resultado de nuestros pecados y desobediencia a Dios. A pesar que si bien es cierto la enfermedad resulta ser consecuencias de nuestros pecados y estilo de vida, más que ser considerado en cáncer un castigo divino debe ser considerado como un llamado que nos hace Cristo a la santidad, a la purificación espiritual. Es un llamado a transformar nuestra vida, de tal forma que busquemos imitar las virtudes de amor, perdón, caridad, para contrarrestar esos pecados. Es la oportunidad perfecta para cambiar.  

Para Santa Hildegarda la enfermedad lejos de ser considerada una carga pesada, y el cáncer como algo terrible, es una oportunidad para cambiar toda nuestra vida y librarnos de los vicios para convertirnos de nuevas personas, personas mas fuertes y sanas que antes, personas unidas a Cristo.

Dios no ayuda a las personas enfermas suprimiendo de golpe su enfermedad o muerte, sino que las ayuda mientras estas se transforman y se liberan del estilo de vida que las enfermaba, para lograr todo esto es fundamental la Fe, que nos libera del pecado y nos motiva a la conversión. 

¿Cómo puede una persona lograr la purificación espiritual a través del cáncer?

En el libro “la psicoterapia de Santa Hildegarda” del Dr. Strehlow, se relata como Santa Hildegarda describe nuestra alma como una ciudad espiritual en la cual 35 fuerzas la fortalecen generando salud y son conocidas como virtudes. Estas virtudes se enfrentan sin cesar a otras 35 fuerzas antagonistas que amenazan la vida, nos enferman y son fuerzas que pertenecen al mundo material, conocidas como vicios o debilidades. Nuestros pensamientos, decisiones, argumentos y sentimientos cotidianos se presentan como personajes que entran en escena y son llamados virtudes o vicios. Por ejemplo, experimentar el sentimiento de no ser valioso o no ser querido o ser prescindible nos debilita y nos hace caer enfermos. 

Por ejemplo, aquellas personas que han vivido su vida desde la soberbia y con mucha falta de humildad, o desde la envidia y con falta de caridad, pueden presentar alteraciones en órganos como las glándulas suprarrenales, caderas, muslos y órganos genitales, desarrollando, cáncer de mama o de próstata, incluso personas con falta de FE pueden desarrollar cáncer de colon.

Otro ejemplo, incluye aquellas personas que viven desde la lujuria muy alejados de la castidad, pueden desarrollar cáncer de testículos.

Santa Hildegarda describe que la clave para llegar a esa purificación espiritual es reconocer nuestras debilidades y fallos, nombrarlos por su nombre y al detectarlos y hacerlos conscientes ya pierden su ´poder sobre nosotros, porque nos damos cuenta del momento en que estamos actuando en base a esos vicios para decir NO de forma voluntaria, volcándonos hacia las virtudes, que son las que nos llevan a sanar. Detrás de cada uno de nuestros vicios existe el mal azotándonos con tal fuerza que la mayoría de las veces no somos conscientes que se trata del mal tratando de dominar nuestra vida y llevándonos a enfermar. Lo bueno es que detrás de todo vicio o mal existe una virtud y por tanto el mal cumple la tarea de sacar lo bueno a la luz. 

Santa Hildegarda recomienda como virtud LA SANTIDAD, debido a que es la fuerza de curación mas potente de todas. Es la fuerza capaz de restablecer, sanar y santificar. Esta fuerza o virtud existe como contraparte para contrarrestar el vicio espiritual conocido como olvido de Dios. El olvido de Dios resulta de creer que podemos llevar nuestra vida en solitario sin ningún tipo de ayuda por parte de Dios, Para acercarnos a Dios ella recomienda retirarse durante un cierto tiempo en soledad y ayunar.

Nuestra alma tiene procesos de curación insospechados, pero es importante aclarar que el proceso de curación no excluye la muerte, la muerte formas parte del conjunto y la enfermedad permite que nos arrepintamos del fracaso de nuestra vida y que volvamos a empezar a una nueva vida, ya sea aquí en el plano terrenal o arriba en la eternidad. Solo el mal se niega a abandonar el antiguo modo de vida y se agarra a la vida física. “Santa Hildegarda dice “la vida no muere, se transforma”. Incluso la muerte puede ser contemplada como el último acto de liberación de la enfermedad del Cáncer, el nacimiento a la vida eterna

¿Existe la necesidad de una nueva Medicina?

Hoy en día a pesar del dinero y esfuerzos invertidos en investigación médica no disponemos aun de una solución definitiva para enfermedades como el cáncer, el reumatismo y las enfermedades del corazón, y esto es debido a que desde la medicina tradicional no son consideradas las enfermedades en sus 4 niveles fundamentales según la visión de Santa Hildegarda, el plano físico a través de una alimentación consciente, el plano psíquico tomando en cuenta los 35 vicios y virtudes detrás de cada enfermedad, el plano natural, al tomar en cuenta el equilibrio de los 4 elementos, aire, fuego, agua y tierra, influyendo incluso positivamente sobre nuestro entorno natural y social, y el plano divino, que es plano espiritual, al restablecer la unidad con Dios. 

Se requiere trabajar en estos 4 niveles para lograr la sanación de una enfermedad. Esa es mi intención, ayudar a las personas a través de su enfermedad a trabajar en estos 4 niveles a través de una medicina que une la ciencia médica, la psicología y la espiritualidad y es lo que hacemos en Medicina con Consciencia

¿Cuál es la clave para lograr sanar una enfermedad como el cáncer?

Primero aclarar que una enfermedad como el cáncer es una enfermedad compleja, difícil, en quien hasta el día de hoy no existen curas definitivas desde la medicina tradicional, lejos de las radioterapias, quimioterapias, y cirugías. La misma Santa Hildegarda afirma que la mejor clave para superar este tipo de enfermedad es identificar lo que ella llama la precancerosis, que son las 5 señales que se presentan de forma precoz antes del desarrollo del cáncer y que actuando en ellas se evita el llamado salto al Cáncer que es el que favorece el desarrollo de tumores malignos, ella describe que la forma mas efectiva de vencer este tipo de enfermedades es evitando que se instaure. Estas señales y todo el cáncer desde la perspectiva de Santa Hildegarda están descritas en el libro del Dr. Wighard Strehlow “El Cáncer y debilidad del sistema inmunitario según Santa Hildegarda”

Los 5 síntomas que se presentan antes de instaurarse el Cáncer son:

1.- Dolores cordiales, debilidad cardiaca, trastornos cardiacos sin base orgánica.

2.- Trastornos del estomago y del intestino, meteorismo, eruptos, hipo, ardor de estómago, pinchazos y cólicos en el estomago

3.- Dolores reumáticos, continuos episodios de enfriamiento, dolores erráticos en todo el cuerpo, cólicos, lumbago, isquialgia, y además cansancio.

4.- Estados de ansiedad, miedo al Cáncer

5.- Antecedentes familiares de Cáncer. 

Santa hildeharda habla de las 6 reglas de oro para evitar que el precancer pase a cancer:

1.- Remedios de la creación

2.- Fuerzas curativas en los alimentos. Adoptar un régimen alimenticio basado en la espelta, las frutas, las legumbres y las verduras. 

3.- Un equilibrio armonioso de trabajo y descanso

4.- Purificar el cuerpo de toxinas del medio ambiente, de los desechos del metabolismo, de los malos humores, toxinas víricas (con ayuda del ASH, es decir sangría), escarificación, moxibustión y fisioterapia 5.- Purificar el alma de sus emociones y sentimientos negativos, problemas y conflictos, logrando la curación de las fuerzas curativas del alma con la ayuda del ayuno hildegardiano, este ayuno representa un medio para la sanación anímica, a través de este podemos obtener las respuestas a preguntas como ¿ cuales pueden ser las causas espirituales de mi enfermedad?, ¿ como puedo sanar las heridas de mi momento actual?.

En la fase de precancerosis se consideran necesarias estas acciones:

  • Observación e identificación de las señales precoces de alarma
  • Eliminación de los focos de infección y purificación de los humores mediante la bebida de lentejas de agua
  • Cambio de alimentación anteriormente mencionado.

¿Cómo podemos hacer para eliminar las resistencias al cambio en una terapia de sanación?

Las resistencias al cambio se dan por el temor a lo desconocido, a no lograr el objetivo esperado y a dejar todo lo conocido por nosotros por muchos años por un terreno incierto que despierta nuestras inseguridades. Implica desapegarse de nuestra forma de vivir por un cambio en muchos niveles que amerita esfuerzo, disciplina, dedicación y compromiso. Solo a través de la fe y la fortaleza que la conseguimos en unidad con dios, buscando de ÉL en todo momento, el nos dará la fuerza para continuar muy a pesar de los tropiezos y los fracasos. A medida que demostramos que estamos dispuestos a cambiar y nos comprometemos profundamente en ello, Dios nos concede de los dones del espíritu santo que nos permitan continuar a pesar del dolor a seguir el camino de la transformación personal  a través del amor, la paciencia, la fe, la fortaleza, la humildad

¿ Que le dirías a una persona con cáncer en estado terminal que sufre día a día y que le teme mucho a la muerte?

Mi llamado a las personas con cáncer en estado terminal es a que atiendan al llamado de Dios en sus vidas, a que incluso en las ultimas fases de la enfermedad no pierdan la FE, y cuando hablo de FE me refiero a tener la voluntad de volcar su mirada a unirse a Dios a través de la oración, el ayuno descrito anteriormente, y a hacer esa introspección de aquellos conflictos que muy posiblemente los llevaron a enfermar, sentimientos negativos como la ira, o la soberbia, aquellos dolores silenciosos que se vivieron en soledad y no fueron expresados es momento de hacerlo.

Aquellas personas que no superan las humillaciones sino que las utilizan de forma continua como combustible para tener siempre nuevos motivos de preocupación terminan destruyendo su sistema inmunológico y nunca lograran eliminar el tumor incluso si es operando 10 veces. Santa Hildegarda dice que es un remedio formidable para crecer ante las dificultades y el reconocer nuestros pecados pidiendo perdón a Dios por ellos es un acto de humildad que podemos tener en situaciones de cáncer muy avanzado. Dios perdona nuestros vicios y pecados cuando hay arrepentimiento de corazón. Se debe empezar por aceptar la enfermedad y depositar la FE en Dios, dejando la situación que ya se sale de nuestras manos en manos de EL que fue el que nos creo y esperar con valentía la muerte no viéndola como el final de la vida que eso es solo obra del mal sino como la oportunidad de seguir nuestro camino de transformación en la eternidad. 

¿ Todas las personas pueden curarse del cáncer si logran trabajar las 3 esferas, cuerpo, mente y espíritu?

El arte de curar de Santa Hildegarda representa una terapia que engloba cuerpo, mente y espíritu, donde ella misma incluso brinda los remedios para cada dolencia consiguiendo el éxito en la mayoría de los pacientes, es importante recalcar que esto no significa que todo el mundo se pueda sanar trabajando su salud a todos los niveles. Santa hildegarda dice “Estos remedios proviene de Dios, y o curarán a la persona o esta morirá, o bien Dios no quiere que se libere”

Sin lugar a dudas Dios quiere que todos se curen. Cristo siempre sanaba a todos los enfermos que se lo pedían. Sin embargo existen algunos casos en los que Dios en su infinita sabiduría, sabe que curar a determinada persona enferma no seria bueno para ella

ESCRITO POR

Katiuska Villasmil

Médico anestesiólogo

Deja un comentario

Artículo añadido al carrito.
0 artículos - $0